Por: Arturo Reyes Isidoro.- Tiene que reconocerse que esta vez sí hicieron bien las cosas en el gobierno cuitlahuista para imponer a la nueva titular del Órgano de Fiscalización Superior (ORFIS) del Estado de Veracruz, Delia González Cobos.
Lo que me llama poderosamente la atención es la unanimidad que lograron de prácticamente todos los diputados, de los diversos partidos representados en la 65 Legislatura local.
Presuntamente un grupo de legisladores (es un decir) de Morena se había inconformado con la terna final y ayer temprano circuló la versión de que iban a sacar de la orden del día la votación decisiva.
Al final plancharon a todos, a los presuntos rebeldes morenos y a los de oposición, incluyendo a los panistas, de quienes se esperaba o que no votaran a favor o que lo hicieran bajo protesta, o que alguno de ellos subiera a la tribuna para disentir y anunciar que se opondría.
Como en los viejos tiempos del PRI volvió la aplanadora. El gobierno de la Cuarta Transformación logró carro completo, de todas todas. A partir de ahora, el gobierno morenista podrá hacer y deshacer a su antojo: ya tiene a todos los diputados en la bolsa.
Siete meses tuvieron que pasar para que el gobierno de Morena pudiera darle vuelta a la tortilla, desde aquel 22 de febrero pasado cuando el Congreso local desechó dos dictámenes de juicio político contra Jorge Winckler que lo mantuvieron en el cargo.
Pero, ¿solo con melodiosas y excitantes palabras dichas al oído los convencieron?,¿o acaso los amenazaron?, ¿o fue a cambio de algo y si fue así, de qué?, ¿les untaron “manteca” en las manos, o les ofrecieron unas “plaquitas” de taxi, o alguna concesión, algún negocio? ¿Nadie se pudo amarrar al mástil del barco para no escuchar el canto de las sirenas morenistas?
Los de Morena han reactivado, y de qué forma, la vieja maquinaria priista, omnipotente, pero estamos en la Cuarta Transformación, y cabe esperar que de aquí pa’l real van a arrasar con todo y no va a haber quien los pare.
La plancha, pues, ya funcionó. Ahora sí pueden corregir el proceso y sacar legalmente de su cargo a Winckler y a todos los rescoldos del yunismo, pero también actuar contra todo lo que se les oponga o que vean como un obstáculo para lograr sus propósitos.
El único contrapeso real que queda es el de la prensa profesional, crítica, independiente.
¿QUÉ SIGUE?
Ya casi se termina septiembre, hemos entrado al otoño y el cuitlahuismo toma el control no solo del Poder Legislativo sino también de un organismo autónomo como el ORFIS. Como preguntara la Arquidiócesis de Xalapa: ¿qué sigue?
Cómo andan las cosas que lo único bueno que ve la gente es que en octubre entrante ¡se acaba el horario de verano! Tanto que le cuesta a uno acostumbrarse y ahora viene otra vez un cambio para luego regresar a lo mismo.
Punto y coma
Cafeteando
PROSA APRISA
Astrolabio Político
ADELANTE
O P I N I O N