Por: Arturo Reyes Isidoro.- Con el inicio de mes, el senador Ricardo Ahued volvió a la Cámara alta del Congreso de la Unión. Tuvo un buen gesto de cortesía: agradeció a su suplente Ernesto Pérez Astorga la labor que realizó.
Hasta antes de que solicitara licencia para irse como titular de Aduanas realizaba un gran trabajo de gestoría a favor de veracruzanos de toda la geografía estatal.
Algunas veces casualmente me presenté a sus oficinas en Xalapa y pude constatar el mundo de gente que llegaba a verlo. Atendía a todos, muy dispuesto siempre. Prácticamente ahí vivía los fines de semana.
Comprometido con su responsabilidad, seguramente reanudará esa tarea. Desde ahí hará política y será de gran ayuda para el gobernador Cuitláhuac García.
Muchos inexpertos piensan que la política se hace “grillando” o solo picando piedra, intrigando, obstaculizando, descalificando, cuando la mejor, y además la única manera, de hacer política efectiva es trabajando, ofreciendo resultados. Nunca falla. De ahí el éxito de Ahued.