Salud, unión familiar, bienestar, integridad personal, pero sobre todo trabajo, son las principales peticiones que los peregrinos rogaron este día a la Virgen de Guadalupe.
Desde la madrugada de este lunes miles de fieles a la guadalupana, arribaron en distintas peregrinaciones a la Basílica Menor, ubicada en el barrio conocido como El Dique de esta capital.
Niños vestidos de Juan Diego con sombreros de palma y bigotes negros pintados con lápiz para delinear la ceja; niñas con su rebozo, trenzas de estambre, falda multicolor, blusa de manta y chapas “coloreteadas con el labial rojo de mamá, se dejan ver por montones tanto en la iglesia como por toda la calle principal del recinto.
Coronas llenas de flores blancas, amarillas y rojas inundan la iglesia, el altar a la virgen morena está repleto de cientos de muestra de cariño y fe, ya que desde hace 11 días iniciaron las peregrinaciones a la Basílica Menor de esta capital.
Los peregrinos llegan por montones, a pesar de la crisis económica por la que atraviesa el estado, ellos como cada año acuden a la agradecer a la Virgen de Guadalupe, el apoyo recibido durante este año.
Peregrinaciones de taxistas, colectivos, transporte público, empresas de toda índole como departamentales, de servicios, grupos organizados, que pertenecen a las distintas parroquias, entre otros son los que año con año, fieles a la tradición asisten con fe y devoción a esta tradición de la iglesia católica mexicana.
Algunos de los asistentes entre sus peticiones se encuentran las de recuperar pronto la salud, por su familia que permanezca unida, pero sobre todo trabajo y seguridad.
A pregunta expresa, don Juan, uno de los asistentes, indicó que su preocupación principal era la de quedarse sin empleo, ya que ha leído en las noticias, que con el nuevo gobierno podría darse el despido masivo de personas, lo que realmente -dijo- es preocupante.
Indicó que cada año asiste a la Iglesia del Dique a cumplir un juramento, ya que la guadalupana lo ayudó a dejar el alcohol, sin embargo, ahora su pesar es el de quedarse sin empleo.
Otra de las asistentes de nombre Jaqueline, mencionó que es tradición familiar asistir cada año a dar las gracias a la virgen, expuso que tiene un negocio propio y que debido a la crisis las ventas han bajado de manera considerable, pero la devoción por la Morena del Tepeyac es lo que cada año los mueve a asistir y entregarle un ramo de flores rojas.
En tanto en las inmediaciones de la iglesia, decenas de vendedores de todo tipo de productos, desde comidas, imágenes religiosas, escapularios, flores, coronas y demás hacen su agosto con los miles de peregrinos que durante esta última semana han arribado al barrio El Dique.
Se espera que en el transcurso del día continúe el arribo de visitantes y peregrinos a visitar a la Virgen de Guadalupe, quien este 2016 cumple 485 años -de acuerdo a la tradición católica- de habérsele aparecido a Juan Diego en el Cerro del Tepeyac.
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